La mayor gestora de fondos del mundo ve una oportunidad en medio de la incertidumbre política.
BlackRock, que gestiona más de 11.5 billones de dólares en activos, dio un giro rápido a su estrategia. Luego de una semana en la que recomendó cautela con las acciones estadounidenses, ahora las sobrepondera, impulsada por la decisión de la administración Trump de pausar por 90 días la mayoría de los aranceles.
Este respiro, según el Instituto de Inversión de BlackRock, reduce el riesgo inmediato de un “accidente financiero” y brinda margen para que el mercado se enfoque en fundamentos sólidos como las ganancias corporativas y el impulso de megatendencias como la inteligencia artificial.
Aunque advierten que la volatilidad seguirá presente, BlackRock confía en que el mercado puede sostenerse mientras la política comercial no dé un giro abrupto.
Este cambio de postura refleja cómo hasta los grandes jugadores ajustan su visión rápidamente ante el más mínimo cambio de señales políticas. Así de volátil está el mercado.